Los microcreditos diferidos del Banco Fie 2019-2023 caso: agencia Villa Adela
Abstract
La presente Memoria Laboral refleja la experiencia adquirida como Oficial de Negocios de Microcréditos en el Banco Fie, agencia Villa Adela, con un enfoque particular en los desafíos enfrentados durante y después de la pandemia. Donde aproximadamente el 90% de los clientes del banco se vieron gravemente afectados por las restricciones impuestas para controlar la propagación del coronavirus. Esto resultó en una pérdida significativa de ingresos y en dificultades del cliente para cumplir con el pago de las cuotas de sus créditos. En este contexto, la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), emite circulares para que las Entidades de Intermediación Financiera (EIF) puedan aplicar el diferimiento de pago de créditos, con el objetivo de apoyar a los deudores que enfrentaban dificultades financieras debido a la crisis sanitaria y económica. Estos diferimientos o postergación de cuotas se caracterizan por tener períodos de gracia o periodos de tiempo durante los cuales los prestatarios no tienen que realizar pagos de capital o intereses, proporcionando un alivio temporal para ayudar a mantener la estabilidad financiera durante tiempos difíciles. Dando así el Banco Fie, una respuesta oportuna a todos sus clientes con el fin de que los prestatarios puedan aplazar los pagos durante un período de tiempo específico, lo que les da margen para recuperarse económicamente antes de asumir el reembolso de sus préstamos. Estos diferimientos tuvieron como fase inicial; diferimientos automáticos donde se postergo los pagos de capital e interés para luego ser cancelados al final del plan de pagos. Posteriormente se ejecutaron reprogramaciones especiales (como primera etapa) con 6 meses de gracia. Seguidamente (como segunda etapa), se ofrecieron reprogramaciones habituales que fueron a través de solicitudes, acompañados de evaluación y visitas para ser aprobadas, con el fin de ayudar a los prestatarios vulnerables a superar los desafíos económicos causados por la pandemia, ofreciéndoles un alivio temporal en el pago de sus préstamos hasta que puedan recuperarse económicamente. Sin embargo, la ampliación de los diferimientos podría incrementar los riesgos para la solvencia y liquidez del banco. Esto podría afectar su capacidad para cumplir con los pagos en el largo plazo.