dc.description.abstract | Los sistemas de administración y control gubernamentales establecidos por la Ley 1178 tienen, a la fecha, una vigencia de 19 años, si bien la norma básica de cada uno de los sistemas se emitió hasta siete años después de promulgada la ley, hasta la fecha algunos sistemas siguen modificando su normativa básica, es el caso del sistema de administración de bienes y servicios, en consecuencia las entidades públicas no han desarrollado ni implantado en su totalidad los sistemas regulados por la ley . La Contraloría General del Estado no ha cumplido a cabalidad la función asignada por la Ley 1178, por cuanto la gestión pública continua siendo ineficiente e ineficaz. Ha limitado el control gubernamental en su ámbito y naturaleza a la ejecución de auditorías financieras y recomendaciones de del control interno como única tarea de las Unidades de Auditoría interna. Las auditorías financieras realizadas anualmente en las entidades públicas, si bien son importantes para fines de transparencia de la gestión pública, no tienen utilidad en la toma de decisiones de la Máxima Autoridad Ejecutiva de las entidades públicas, ya que son realizadas y presentadas de manera inoportuna. Las Máximas Autoridades Ejecutivas reconocen que la razón principal por la cual se hacen auditorías a los estados financieros de la entidad, es el cumplimiento de la normativa y esperan que el cumplimiento de las recomendaciones de control interno ayude a mejorar los procedimientos administrativos de la gestión, no los resultados. De manera general las auditorías financieras y especiales no concluyen en la identificación de responsables, en consecuencia no se establecen responsabilidades ejecutivas por la función pública, se dan casos de responsabilidad civil y administrativa. El control Interno actual, cuya cobertura solo alcanza a la ejecución de auditorías financieras, limita la capacidad de gestión por resultados de las Máximas Autoridades Ejecutivas de las entidades públicas, al concentrar su atención solo en operaciones contables financieras, presupuestarias y de patrimonio. En toda organización el logro de resultados está íntimamente ligado a la presencia de talento humano. El personal profesional y de apoyo capacitado y empoderado con los objetivos institucionales, es determinante para el éxito de la gestión de todo tipo de organizaciones. La evaluación de los resultados de la gestión pública no es sujeto de auditorías, debido a la carencia de profesionales que diseñen indicadores de evaluación, desarrollen instrumentos para la gestión del riesgo, y practiquen auditorias que contribuyan a mejorar la obtención de resultados. Actualmente, en el mercado profesional del país no hay oferta de profesionales especializados en auditorías operativas, ambientales y por resultados. Las universidades públicas y privadas del país no están formando en el pre grado ni en el postgrado profesionales del área de Auditoría o Contaduría pública con conocimientos complementarios a la auditoría financiera, capaces de contribuir al control de planes y programas orientados a resolver los diversos problemas de la sociedad. | es_ES |