Competencias del personal médico del primer nivel para la atención integral a mujeres en situación de violencia sexual macro distritos de La Paz, noviembre 2012.
Abstract
Objetivo. Determinar las competencias que tiene el personal médico del primer nivel del Servicio Departamental de Salud de La Paz SEDES, para la atención integral de la violencia sexual en mujeres en situación de violencia sexual, que acudieron a estos servicios ubicados en los siete macro distritos de la ciudad de La Paz Bolivia.
Material y métodos. En noviembre de 2012 se realizó un estudio transversal en 21 unidades de salud del primer nivel pertenecientes al SEDES La Paz con reporte de atención de por lo menos un caso de violencia sexual en mujeres, durante enero a octubre del mismo año de la investigación; mediante la aplicación de un cuestionario a 39 médicos y médicas que atendieron estos casos. El instrumento se diseñó para estimar el nivel de conocimiento de los manuales y guías para el manejo integral para la atención de pacientes mujeres en situación de violencia sexual, Se estableció además la actitud que tiene el personal médico para la atención integral de estas pacientes, e identificó el nivel de práctica médica a través de la tipificación de las barreras institucionales o personales, al realizar los procedimientos durante la atención. A través del uso de criterios mínimos de respuesta para cada ítem, basados en el Manual de Normas y Procedimientos para el Manejo de la Violencia Sexual en Redes y Servicios de Salud del MSD publicado el 2005 y los lineamientos de procedimientos de la Guía para el Manejo de la Violencia Sexual en Servicios de Salud del SEDES La Paz publicado el 2011, se logró clasificar el nivel de conocimiento, actitud y práctica del personal entrevistado en tres niveles: un nivel suficiente reflejando un grado de conocimiento, actitud y el cumplimiento asistencial razonables, un nivel insuficiente que ha reflejado un estado desconocimiento y de adherencia a los procesos en cuanto a actitud y práctica que no es aceptable y por último un nivel de desconocimiento o no realización de estos procedimientos; permitiendo finalmente la descripción de los datos en dos niveles de competencia: suficiente y deficiente.
Resultados. El 51% de los entrevistados y las entrevistadas no han recibido capacitación alguna. Del 49% que han recibido capacitación el 30% lo ha hecho a través de un taller en la institución donde trabaja de los cuales el 28% son médicos y médicas generales, siendo el 10 % de este grupo del sexo femenino. Respecto al tiempo transcurrido desde la última atención de este tipo de casos por el personal entrevistado, en el 56% el último caso atendido de violencia sexual se encuentra en un periodo “vigente” habiéndose tratado a la paciente entre el 1 de enero a 27 de septiembre del 2012 y el 10% los atendieron en un periodo reciente”. Respecto al nivel de conocimiento que el personal médico entrevistado tiene sobre los procedimientos para la atención de casos de violencia sexual de acuerdo a la normativa 98% de las entrevistadas y los entrevistados tiene un nivel de conocimiento deficiente, de los cuales el 46% pertenece al sexo femenino, observando además un desconocimiento mayor respecto al esquema de profilaxis para ITS y VIH en general. En lo que concierne a la actitud, el 56% del personal médico han mostrado un nivel de actitud deficiente de los cuales el 33% pertenece al sexo masculino, siendo mayor esta actitud desfavorable en general, para el uso de la anticoncepción de emergencia en primer nivel. Finalmente en cuanto a la práctica en general, que ha realizado el personal médico, durante la atención de pacientes en situación de violencia sexual, se observa que el 98% de las entrevistadas y los entrevistados realizó prácticas deficientes, de los cuales el 51% pertenecen al sexo masculino, y en general sobre todo durante la recolección de evidencias y el inicio de la profilaxis para VIH e ITS.