Modelacion de la cuenca del rio Jillusaya para la determinacion de caudales de crecida en el Centro Experimental de Cota Cota empleando modelos de simulacion
Resumen
La investigación se llevó a cabo en la cuenca del rio Jillusaya (Municipio Nuestra Señora de La Paz, La Paz). El objetivo de este estudio fue modelar la cuenca para la determinación de caudales de crecida empleando modelos numéricos de simulación. Se probaron las capacidades del programa de simulación HEC- HMS, con el fin de simular hidrogramas de crecida para cada evento extremo monitoreado, diferentes periodos de retorno y bajo un contexto de crecimiento de la mancha urbana. Para la evaluación de zonas de inundación, además de la aplicación del modelo HEC-RAS, se realizó un análisis multi-temporal de imágenes satelitales para la determinación de coberturas a diferentes años. Un sensor de nivel de agua fue instalado en el punto de control a la salida de la cuenca de estudio para el registro de caudales. Se ha logrado la generación de un modelo de elevación digital de alta resolución del rio Jillusaya a partir de una moderna técnica empleando un Escáner Laser Terrestre (LIDAR).
Los resultados obtenidos muestran un coeficiente de determinación R² = 0.915 al comparar el gasto máximo simulado y el gasto máximo observado, lo que indica que el modelo HEC-HMS, logra explicar estadísticamente el 91.5% de los eventos extremos analizados. Si bien se obtuvo una alta confiabilidad del modelo, no se puede dejar de lado el comportamiento de picos sucesivos en las curvas de recesión de los hidrogramas. Este efecto se atribuyó a un comportamiento de embalse producido en el cauce por la presencia de una obra hidráulica de encausamiento en la transición del cauce de rio y la canalización. Este efecto sumado a la onda de crecida generada en la conjunción de cauces de las unidades hidrológicas da como resultado la forma característica observada.
Para la evaluación de la respuesta hidráulica del rio se empleó el mayor evento modelado en el HEC HMS con un caudal de 43.1 m³ sˉ¹ (proyección 2015, periodo de retorno de 100 años). Los resultados mostraron que el rio Jillusaya no pierde la capacidad hidráulica de transportar la totalidad del caudal por el cauce principal para el evento extremo seleccionado, descartando el riesgo de inundación.