dc.description.abstract | En el presente documento se describe el funcionamiento de un sistema de control para ascensores, así como el diseño y construcción del mismo.
En el capitulo I. Un sistema de control de ascensores es un sistema sin duda complejo.
Es una forma didáctica de enseñar automatización y control así como adentrarse en el funcionamiento de los ascensores.
En nuestro medio un sistema de control de ascensores es un requerimiento real, pues existen edificios y demás construcciones que los requieren, esto a cada paso que da el avance de nuevas construcciones en las distintas ciudades y departamentos de nuestro país.
Planteamos, incursionar en el diseño y producción de sistemas de control de ascensores para satisfacer el requerimiento interno del mercado y procurar la fabricación y exportación de estos sistemas.
El proyecto será de beneficio para la sociedad ya que permitirá el desarrollo del mismo.
El proyecto como tal esta limitado a ser un prototipo, en cuanto no se le inyecte una inversión económica para fabricación en masa del mismo.
En el capitulo II, tenemos la estructura de un ascensor.
Un ascensor es un medio por el cual personas pueden desplazarse verticalmente en una edificación de pisos, como en un edificio.
Esta basado de un sistema mecánico, en un sistema electrónico y de un sistema informático.
El motor eléctrico, de diseño especial para ascensores, es el encargado de generar un movimiento rotativo.
Además de ser más rápidos, estos ascensores tienen bastante buena nivelación. Ella se produce a baja velocidad, es decir entre 1/3 y 1/4 de la velocidad nominal, o sea que antes de llegar al piso deseado, un mecanismo efectúa el cambio de velocidad, y funciona en baja hasta la posición de nivelación, la que se produce con un frenado suave y preciso.
Con el avance de la tecnología hoy puede accederse en nuestro medio, con valores razonables, a elementos que solucionan el problema y/o lo previenen. Uno de ellos y que puede adaptarse a cualquier ascensor es la colocación de una báscula. Las hay de distinto tipo, algunas se colocan en la parte inferior del piso de la cabina, otras en los cables de tracción, algunas sobre el bastidor.
Por razones de inercia, desde la apertura –a su vez inexacta en cuanto al momento de la puerta hasta la detención real de la cabina, difícilmente ésta pare justo a nivel del rellano. Esto es sumamente peligroso, particularmente si el ascensor llevara dirección ascendente. El espacio que queda entre la cabina mal detenida y el piso del rellano, es un nefasto acceso al hueco que ha provocado muchas muertes. En los registros de accidentes figuran caídas de adultos, niños y hasta varios casos de perros. Pero sin llegar a estos casos extremos, ese “tironeo” de las puertas para abrirlas sin la cabina detenida, provoca un desgaste prematuro y rotura de las cerraduras electromecánicas. En el mejor de los casos, si es tempranamente detectada la falla así producida, se reemplaza la cerradura, lo que genera un gasto al consorcio que pudo haber sido evitado con sólo actuar adecuadamente. Peor aún cuando no es descubierta a tiempo y permite la rotura abrir la puerta totalmente sin que se encuentre la cabina en el rellano, dejando al usuario irremediablemente frente al vacío del hueco. De más está decir lo que sucede seguidamente en la mayoría de los casos. La solución sobrevino cuando se desarrolló un tipo de patín. | es_ES |