La necesidad de incorporar un psicólogo jurídico, en los juzgados de familia
Resumen
La elevada cifra de personas que pasan por la experiencia de la separación y/o el divorcio, pueden verse afectadas por alteraciones emocionales y psicológicas que condicionaran el desarrollo de su vida de modo permanente, si no son detectados y tratados a tiempo. Los padres, se enfrentaran al duelo, y sin proponérselo, pueden provocar en sus hijos perturbaciones psicológicas como la depresión infantil, la baja autoestima, el Síndrome de Alienación Parental, entre otras, cuyas secuelas son desastrosas para su formación personal, emocional y psicológica. Los hijos por su parte, pierden la estructura familiar, pudiendo asumir conductas de depresión, agresión, uso y abuso de alcohol y drogas, baja de calificaciones, conflictos repetidos con sus compañeros, actitudes de desprecio hacia los padres, etc.; son víctimas de la guerra de sus padres, se ven obligados a crecer en una familia mono parental o ensamblada, que origina en ellos reacciones inesperadas, de tipo conductual, psicológico y personal que condicionarán su desarrollo personal y emocional.