Bitcoin y criptomonedas, ¿la nueva forma de dinero?, Bolivia y Latinoamérica en un entorno globalizado
Resumen
El dinero, a lo largo de la historia de la humanidad ha sido un elemento fundamental e imprescindible para el desarrollo de la vida de las personas de las diferentes sociedades, quienes en su afán de contar con la capacidad de pago o intercambio de diferentes productos y/o servicios; han visto la necesidad de establecer sistemas de pago e intercambio efectivos y simples, considerando que la enorme variedad de necesidades individuales de la población, requerían el establecimiento de un sistema de pagos diferente al trueque (por poner un ejemplo), en el cual las personas de una sociedad puedan contar con un método de pagos inmediatamente reconocible por todos los integrantes de una sociedad, lo cual garantizaría una fluidez en la realización de transacciones de pago o intercambio de bienes y servicios. Con estas consideraciones iniciales, con el constante crecimiento de la población y el cambio en las necesidades comerciales, la forma del dinero a lo largo de la historia de la humanidad, ha sufrido diferentes cambios de paradigma en el imaginario popular respecto a lo que se entiende como “dinero”, como es el caso de los “billetes de papel” que usamos en la actualidad, los cuales vienen a ser básicamente solo un “trozo de papel” que constituye una “promesa de pago”, y no tiene un valor implícito en sí misma, más que el valor del papel y la impresión que lleva. Este concepto del “billete de papel” (que actualmente usamos), que es aceptado de manera universal, de seguro fue objeto de rechazo y susceptibilidad por parte de las sociedades antiguas que acostumbraban a utilizar monedas de oro, plata u otros metales como medios de pago, las cuales ya tienen un valor implícito por el metal con el que estaban fabricadas, lo cual brindaba la seguridad de su valor a quienes las poseían. De la misma manera, la incursión y posicionamiento de la tecnología digital nos ha llevado a utilizar diferentes métodos de pago digital (no físico) ligados al dinero o moneda de curso legal en el país, los cuales son provistos principalmente por el sector bancario que ofrece servicios como los de Banca por Internet, Banca Móvil, así como las tarjetas de crédito o débito. Con esta evolución en el imaginario popular, al entender y aceptar como una forma de dinero, a los mencionados servicios electrónicos, se rompió otro importante paradigma en la sociedad moderna; que se traduce en la aceptación de un tipo de dinero digital, que aunque carece de valor implícito y no es físico, es ampliamente aceptado y reconocido como método de pago o intercambio de bienes y/o servicios. Todas estas situaciones, parecen haber creado el escenario propicio para el uso de las llamadas criptomonedas como Bitcoin, la cual se constituye en un medio de pago ampliamente aceptado en diferentes partes del mundo (aunque carente de “legalidad” plena como dinero), que al igual que cualquier otro sistema de pago legal avalado por los Estados, también es utilizado para el pago o intercambio de bienes y/o servicios en todo el mundo. La difusión del concepto y uso de las criptomonedas en Bolivia, se ha dado en una época en la cual se registraron diferentes casos de “Estafa Piramidal”, vinculados aparentemente a Bitcoin y otras criptomonedas, situación que las puso en tela de juicio por parte de las autoridades e instituciones estatales y de alguna manera se las estigmatizó como algo fraudulento e ilegal, lo que llevó a establecer prohibiciones que impiden una implementación de procedimientos adecuados para efectuar controles sobre un comercio de criptomonedas ya existente en el país. En este sentido, surge la necesidad de efectuar un análisis objetivo que nos permita tener una idea clara respecto a lo que debemos esperar de este fenómeno de las criptomonedas, por lo cual con el presente estudio se pretende hacer un aporte para que la población tenga las herramientas suficientes para tomar buenas decisiones al momento de querer utilizar criptomonedas como medio de pago o inversión.