Análisis de la importancia de la auditoria como herramienta de control para las empresas

Abstract

En la vida organizacional moderna es imprescindible contar con el servicio de la Auditoría en forma Interna y Externa ya que el resultado permite confirmar el correcto funcionamiento de las operaciones y contar con información útil y de confianza, para la toma de decisiones. La existencia de la Auditoría como herramienta de control está enteramente apoyada por la alta gerencia de la organización, quién pone especial cuidado en la definición de sus funciones. Por un lado, la Auditoria Interna que es dependiente y la Auditoria Externa que es contratada e independiente, pero ambas con su contribución al seguimiento del control. La auditoría es realizada por profesionales competentes que poseen un conocimiento suficiente de las materias y aspectos técnicos objeto de la misma y cuentan con los medios adecuados para ello, ejecutando su labor en cumplimiento de normas aplicables a la práctica de la auditoria, entre estas se encuentra las Normas Internacionales de Auditoria (NIAS) emitidas por el Consejo de Normas Internacionales de Auditoria y Aseguramiento (IAASB). El desarrollo y evolución de las organizaciones ha generado la actuación de la Auditoria en varios ámbitos de especialización, de ahí la existencia de diferentes tipos de auditoria como son propiamente la Interna y Externa, Financiera, Tributaria, Operacional, Administrativa, de Cumplimiento, Legal, Informática, Integral, Forense, Gubernamental y Ambiental. La realización de la auditoria en ocasiones levanta inquietudes en la organización, situación que en realidad es injustificada, ya que su realización es constructiva y positiva en las organizaciones constituyéndose en una técnica de control utilizada para la optimización de las operaciones y posteriormente permitirá tomar decisiones de mejora. Por tal sentido el control constituye una función del proceso administrativo y está presente en cualquier tipo de organización sea pública o privada, identificándose como un proceso y de acuerdo al tiempo de realización puede ser preventivo, posterior y concurrente o de retroalimentación, a efecto de alcanzar el éxito mediante la obtención de los objetivos organizacionales. Por tanto, la auditoria se constituye como una herramienta de control y supervisión que contribuye a la creación de una cultura de disciplina de la organización y permite descubrir falencias en las estructuras existentes en la organización.