Información, educación y capacitación para mujeres privadas de libertad del Centro Penitenciario de Miraflores
Abstract
La prisión, tanto para hombres como para mujeres, constuituye una situación que transforma a estas personas en sujetos en estado de vulnerabilidad. “Aunque las mujeres comparten problemas de los hombres privados de la libertad, como el hacinamiento y la falta de recursos, ellas tienen circunstancias de vida específicas asociadas al género; por ejemplo, las experiencias de discriminación por la jerarquía de género y el rol de ser las principales cuidadoras de sus hijos” (Sánchez – Mejía, 2019, p. 203). Sobre todo, las madres de hijos/ menores de edad, aunque no tengan consigo a sus hijos/as en la prisión, persistentemente están pendientes de la satisfacción de las necesidades familiares, mientras aquellas privadas de libertad sin hijos dependientes, también persiguen la `posibilidad de lograr ingresos para necesidades emergentes de sus gestiones de orden legal, sobre todo. Por ello, frente a la probabilidad de generar un ingreso dentro del penal las mujeres pugnan por constituirse en beneficiarias de las ofertas del sistema penitenciario. El acceso a la probabilidad de trabajo en prisión, que el Centro Penitenciario oferta, es motivo de pugnas que desembocan generalmente en disputas y rencillas que generan relaciones hostiles y de reclamos permanentes. El acceso al servicio de lavandería que presta el centro penitenciario es motivo, que, con mayor frecuencia e intensidad, produce un ambiente adverso al mantenimiento de relaciones interpersonales como se desea y espera en un recinto de residencia obligada. Frente a este problema, y tomando como base un proceso diagnóstico, se planteó efectuar un proceso de información, educación y capacitación en competencias relativas al manejo y desempeño en el servicio de lavandería, así como de reflexiones acerca de relaciones interpersonales deseables.