Implementación del uso de la pulsera electrónica en el régimen penitenciario Boliviano
Resumen
Las nuevas tecnologías de nuestra época nos abren nuevas puertas en diversos ámbitos de la vida cotidiana. En el área de la política criminal y del derecho penitenciario, una de las tecnologías de mayor impacto es la de la vigilancia electrónica a través de pulseras o tobilleras mediante sus sistemas Activo y Pasivo. La Vigilancia Electrónica es una alternativa a la privación de libertad en casos específicos como la detención preventiva, delitos leves, mujeres embarazadas, enfermos terminales, personas de la tercera edad o en régimen de prelibertad. El uso voluntario de estos instrumentos de control conlleva una variedad de beneficios, tanto para el privado de libertad como para el Estado, contribuyendo a la consecución de los fines de la pena y a la preservación de los derechos del individuo beneficiado. Además, la Vigilancia Electrónica evita una serie de problemas derivados del encarcelamiento como el hacinamiento, el contagio criminal, la sobrepoblación carcelaria, la pérdida de lazos familiares y otros factores negativos que se dan día tras día dentro de las cárceles. Por si ello fuera poco, pulseras y tobilleras ya sea en sistema activo o pasivo, favorecen a la rehabilitación de los condenados y a su readaptación ya que aseguran la permanencia en el hogar, el mantenimiento y el desarrollo de un trabajo o la posibilidad de estudiar, factores que contribuyen a reducir los índices de reincidencia y a lograr la tan nombrada reinserción social. La incorporación de la Vigilancia Electrónica como medida alternativa a la privación de libertad no es solamente una buena medida sino que quienes están involucrados en el tema en nuestro país consideran que su implementación en nuestro Régimen Penitenciario es necesaria.