La mujer comerciante - feria 16 de julio, El Alto - como sujeto de microcrédito caso: entidades microfinancieras no reguladas EMF'S (modalidad: bancos comunales). Período 2003-2006

Abstract

Frente a las necesidades económicas crecientes y la falta de empleo en el sector empresarial moderno, la mujer se ve forzada a crear su propio empleo y se va incorporando a la llamada economía informal, en la que el rendimiento y las condiciones de trabajo distan mucho de las de un empleado fijo asalariado. En América Latina, las mujeres ocupan un importante lugar en la mano de obra del sector informal, y a menudo, componen casi la mitad o más de esta población. Las mujeres estén o no estén involucradas en actividades generadoras de ingresos, necesitan créditos por las mismas razones que los varones. Uno de los motivos principales es el incremento de ingresos familiares mediante la expansión de la producción y la inversión, así como el mejoramiento del bienestar familiar en términos de un mayor consumo. Las mujeres han estado y siguen estando seriamente involucradas en el mejoramiento de la vida familiar. Necesitan créditos para aumentar su productividad y sus ingresos, al mismo tiempo mejorar su nivel de vida y el de su familia. La participación de las mujeres comerciantes en actividades de generación de ingresos es un fenómeno común en países en desarrollo como el nuestro. A lo largo de Asia, África y América Latina son las mujeres las que se dedican al comercio y a los pequeños negocios. También son las mujeres las que contribuyen en gran medida a las economías de muchos países en vías de desarrollo con la producción de alimentos y cultivos agrícolas.