"Impacto del ALCA y el TLC en el Mercado Laboral de Bolivia"
Resumen
Los Tratados de Libre Comercio o TLC, consisten en un acuerdo comercial regional o bilateral para ampliar el mercado de bienes y servicios entre los países participantes.
Básicamente, consiste en la eliminación o rebaja sustancial de los aranceles para los bienes entre las partes, y acuerdos en materia de servicios. Este acuerdo se rige por las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) o por mutuo acuerdo entre los países participantes.
La conformación del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) supone la apertura de los mercados de 34 de los 35 países del hemisferio occidental, es decir la eliminación de las barreras arancelarias y no arancelarias para el intercambio de bienes y un mayor flujo e intercambio de servicios, capitales, información e ideas en el continente. El ALCA es un proceso irreversible, que cuenta con el compromiso de las últimas administraciones de gobierno de los Estados Unidos y ya lleva siete años de gestación, pues se inició en 1994, con ocasión de la 1 Cumbre Hemisférica, efectuada en la ciudad de Miami.
Bolivia es un país que se ha inscrito en el plano comercial en diferentes foros multilaterales y procesos de integración y que además se beneficia de diversos sistemas generalizados de preferencias. En esa medida, tiene que pensar en varios frentes de negociación simultáneamente. Históricamente, Bolivia ha demostrado tener una vocación integracionista. Por ello, puede afirmarse que su futuro y su suerte están vinculados con la integración. El país forma parte de la OMC, la ALADI, la CAN y tiene suscritos acuerdos comerciales con Chile, México y Cuba. Asimismo, es miembro asociado del MERCOSUR y se beneficia de la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas otorgada por los Estados Unidos y accede en términos preferenciales al mercado de Canadá a través del Sistema Generalizado de Preferencias.